19 may 2010

UCR NO A LA CORRUPCION NO AL JUEGO


Ante la campaña de desacreditación y desprestigio de la que está siendo víctima el presidente del Comité Nacional, el propio Partido y muchos de sus dirigentes, y frente la interesada descontextualización de sus dichos, los senadores nacionales de la UCR respaldan la urgencia de centrar el debate político en el sistema institucionalizado de corrupción del gobierno.

El kirchnerismo es sinónimo de corrupción. Por lo cual Ernesto Sanz advirtió sobre la imperiosa necesidad de que se asuman los gravísimos temas que afectan la vida de la gente, en especial los más pobres quienes ven la merma del Estado día a día.

Cuando algún radical impone la cuestión en la agenda pública, obviamente, los oficialistas y sus acólitos, no escatiman críticas. Al tiempo que el gobierno elude su responsabilidad en la corrupción, con cada día más funcionarios denunciados, y en la promoción del juego, cuyo crecimiento alcanzaría el 4,5 por ciento del Producto Bruto, el kirchnerismo dificulta la discusión democrática que permita alcanzar consenso en las soluciones a los verdaderos problemas del país.


¿QUIEN EXPLICA EL AUMENTO DE BINGOS, CASINOS Y CONSUMO DE PACO?

El bloque de diputados de la Unión Cívica Radical expresa la necesidad de promover un debate público sobre la corrupción, el narcotráfico y el juego, y la ausencia absoluta del Estado en la solución de estos flagelos.

Por tal motivo, los diputados radicales sostenemos nuestro más absoluto respaldo al titular del partido, Ernesto Sanz, ante las descalificaciones y agravios recibidos a partir de una tendenciosa descontextualización de sus expresiones.

Desde el gobierno nacional se impulsa una campaña para poner en duda principios y valores sostenidos por nuestro partido en relación a los derechos sociales y a las políticas públicas de inclusión, que promovimos desde la creación de nuestra organización política como fuerza revolucionaria a favor de los desposeídos.

No escuchamos una sola voz oficial que explique el incremento de los bingos y casinos en cada punto de nuestro país y el formidable negocio que supone para algunos empresarios del juego amparados por la administración Kirchner. Tampoco se dice nada sobre el exponencial crecimiento del consumo de paco en los grandes conglomerados urbanos y la ausencia de política oficial en la materia y mucho menos se explica la relación entre el narcotráfico, la efedrina y el financiamiento de la campaña de Cristina Kirchner. Por otra parte los casos de corrupción en el oficialismo y su vinculación con el patrimonio presidencial terminan de cerrar el círculo sobre la turbia relación, drogas, juego y poder.

Por tal motivo el bloque de diputados de la UCR promueve una profunda investigación desde el parlamento a través de las comisiones correspondientes para terminar con la Argentina para unos pocos y para trabajar en la construcción de un país más justo, con inclusión, equidad, trabajo y desarrollo para todos.

Buenos Aires, 18 de mayo de 2010

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